
Entonces un día decides tomarte el tren que habías ignorado tomar, poniendo pretextos para no viajar, y quedarte en tu lugar.
Un día simplemente tomas lo que tienes en los bolsillos y vas a viajar.
A sentir la distancia física de tu lugar, y la incertidumbre de las calles inexploradas por tus pies, jamás.
Tortuga Rosada
Responder